Los 10 fetiches más comunes

A pesar de que cada día es más común que las personas sean más abiertas con su sexualidad, aún existen ciertas cuestiones que se mantienen en secreto, y uno de ellos son los fetiches. Aunque, en ocasiones, se considera algo vergonzoso, lo cierto es que todos hemos llegado a tener gusto por ciertos objetos o prácticas no tan comunes en general.

Un fetiche sexual principalmente está relacionado con la preferencia que podemos tener por ciertos elementos que hacen más placentero nuestro encuentro sexual, y a decir de algunas personas, estas prácticas pueden ayudarnos a llegar a la cima del éxtasis.

La idea del fetiche sexual fue creada por el popular psicoanalista, Sigmund Freud, quien se encargó de estudiar distintos casos, en los cuales principalmente analizaba el porqué las personas buscaban una situación externa al sexo para provocar más placer.

En la actualidad, hay algunos especialistas que se encargan de tratar el trastorno fetichista, principalmente para aquellas personas que se obsesionan con ciertos objetos o escenarios, pero esta situación sería un caso extremo, pues en la mayoría de las ocasiones, las parejas llegan a un trato consensuado, en el cual las dos partes disfrutan y gozan el momento.

Podofilia

En los últimos años, hemos sido testigos de como ha ido aumentando el deseo sexual por los pies, ya sea con su contacto directo o simplemente a través de material audiovisual. Aunque hasta el momento no hay una explicación concisa sobre el porqué ha aumentado el deseo por los pies, lo cierto es que provoca una sensación de satisfacción.

Una de las posibles razones para que su popularidad esté en aumento es debido a los medios de comunicación y la cultura pop, a causa de que constantemente estamos viendo a mujeres sumamente atractivas con pies hermosos, por lo que posiblemente los hombres sientan más atracción por esta parte del cuerpo.

Asimismo, cabe recordar que los pies causan gran excitación debido a que cada pie contiene más de 7,000 terminaciones nerviosas, lo cual los hace una de nuestras zonas erógenas más poderosas.

BDSM

Para muchos, practicar el BDSM no era nada atractivo, pero después de que la trilogía de libros y películas de “50 sombras de Grey” se pusieran de moda, cientos de personas quisieron entrar en el mundo de los juegos eróticos de sumisión.

Antes que nada, tienes que saber que las siglas BDSM, significan “Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo”, y su regla principal, es que cada encuentro se realice siempre de manera consensuada, además de que las personas involucradas estén informadas y por supuesto que cuenten con una palabra de seguridad.

A continuación te contamos cuáles son algunos de los juguetes sexuales que más se utilizan durante la práctica del BDSM, además de algunos consejos prácticos para que te conviertas en un verdadero experto del placer.

La práctica del bondage, está relacionada con las ataduras y las sogas, principalmente porque se intenta restringir el moviendo de una persona para que esta pueda quedar sometida, pero recuerda que los amarres no tienen que ser muy fuertes, pues a pesar de que se tiene que restringir el movimiento, esto no quiere decir que tengamos que lastimarla.

Indiscutiblemente, una de las partes más divertidas de BDSM, es el uso de accesorios, por lo cual en el mercado podrás encontrar cientos de kits que pueden incluir látigos, vibradores, esposas, collares de castigo y por supuesto juegos de cuerdas, aunque si aún no estás muy convencido de entrar en este mundo, pero aun así quieres probar, también puedes intentar hacer las ataduras con sogas comunes, o bien una corbata.

Voyeurismo

El voyeurismo es fetiche que consiste en que las personas se exciten al observar a otra persona, o grupos mientras tienen relaciones sexuales, generalmente, estás personas no suelen participar en el acto, por lo que siempre son espectadoras, originalmente la palabra “Voyeur” se traduce como “el que ve”.

Aunque para algunos el voyeurismo puede convertirse en una práctica compulsiva, resulta bastante normal que nuestro cuerpo se excite al momento de ver a una pareja mantener relaciones sexuales, siempre y cuando esto suceda de manera consensuada y previamente acordada.

Para muchos hombres, la idea de que su pareja tenga encuentros sexuales con otra persona mientras él se encuentra viendo, ya sea escondido o en la misma habitación, es una de las fantasías más comunes, es por eso que actualmente existen distintas alternativas para que ambos puedan disfrutar de este momento, ya sea acudiendo a algún club swinger o bien contratando a una escort o un single para que pueda ayudarlos a cumplir con su fantasía.

Según estudios realizados, los hombres tienen mayor facilidad de excitarse mientras ven a una pareja teniendo relaciones sexuales, principalmente porque gracias a la vista y el olfato su cuerpo reacciona más rápido, teniendo como punto central la masturbación.

Fetiche de lencería

Sin lugar a dudas, la lencería siempre estará ligada con la sensualidad de la mujer, es por eso que para la mayoría de los hombres resulta ser muy importante que su pareja o la persona con que tiene encuentros sexuales utilice esté tipo de prendas, y es que hoy en día, la variedad de ellas es infinita, desde las semi transparentes, hasta las que no dejan nada a la imaginación.

La lencería suele ser uno de los fetiches más comunes entre los varones, y no los culpamos, pues no hay nada más excitante, que sentir distintos tipos de telas sobre el cuerpo de una mujer, además de la seguridad que les da verse sexys y deseadas. Así que no sientas culpa al momento de comprar sensuales conjuntos para tu pareja, pues si de algo estamos seguros es que ambos lo disfrutaran al máximo.

Roleplay

El juego de roles o roleplay, suele ser una de las activadas más comunes entre aquellas parejas que quieren darle un nuevo giro a su relación, y es que qué mejor manera de reavivar la llama del amor, que haciéndose pasar por una persona completamente diferente a la que somos en el día a día.

Invariablemente, la imaginación juega un papel principal en el juego de roles, por lo que es muy importante que ambos participantes elijan escenarios y se comprometan con la actuación de sus personajes, obvio sin caer en el ridículo, pues esto podría hacer que decaiga el ánimo.

Para que la fantasía se lleve a cabo de la mejor forma posible y se vuelva una experiencia excitante, es necesario que se planee con tranquilidad, pues quizá habrá que adquirir alguno que otro disfraz, además de herramientas como dildos o lubricante, para que el disfrute sea aún mayor.

Fetichismo de cuero

La ropa de cuero o látex comúnmente se relaciona con las prácticas sexuales del BDSM, aunque en realidad muchas de las personas que sienten atracción con este tipo de prendas lo ven como una segunda piel, pues al momento de recibir latigazos o cualquier otro tipo de estímulo no sentirá ningún dolor o incomodidad.

Asimismo, hay quienes encuentran placer en el uso del cuero debido a su suavidad y al aroma, aunque también habría que tomar en cuenta que gracias a su forma, este tipo de prendas se adhieren perfectamente al cuerpo, resaltando las curvas de cualquier mujer.

Fetichismo de pelo

La tricofilia o el fetichismo por las cabelleras largas se remonta a la antigüedad, aunque en muchas ocasiones, el cabello largo no se relacionaba con las mujeres, pues algunas fuentes aseguran que los primeros en dejarse la melena larga fueron los hombres.

No obstante, en la actualidad el cabello largo es uno de los signos de la feminidad, motivo por el cual algunos hombres sienten placer al momento de tenerlo entre sus manos, olerlo, besarlo o bien tocarse sus genitales con una larga cabellera, por otro lado, también hay quienes prefieren el uso de pelucas, ya que existe duna gran variedad de colores, y hasta hay algunas que simulan el cabello mojado o el uso de flequillo.

Fetiche de zapatos

El fetiche que se relaciona con el uso de zapatos tiene por nombre refitismo, y algunos especialistas han relacionado esta parafilia con la idea de poder y control debido a que de cierta forma se está bajo la sumisión o el dominio de nuestra pareja sexual.

Las personas que disfrutan de este fetiche se caracterizan por sentir placer al momento de acariciar, oler, besar y hasta lamber el calzado o bien sentir los zapatos encima de ellos, y como lo mencionábamos anteriormente es una práctica muy utilizada por los sadomasoquistas.

Claro que también hay quienes únicamente sienten excitación por los zapatos de tacón, por lo que ese fetiche se demoniza como altocalcifilia, y aunque parezca muy extraño que alguien siente satisfacción por la forma de los zapatos, lo cierto es que esta parafilia es otra de las comunes entre los hombres.

Fetiche de ropa interior usada

Vivir tu sexualidad al máximo no solamente implica tener sexo, sino que también puedes ayudarte de otros elementos para llevar a cabo tus fantasías, tal y como lo es la compra de ropa interior usada, aunque hay quienes también prefieren otro tipo de prendas como lo son blusas, pantalones o mallones de ejercicio.

De acuerdo a estudios recientes, la adquisición de ropa interior usada provoca gran excitación en las personas, principalmente por la relación que existe con el aroma, ya que se relaciona con las reacciones bioquímicas, y provoca gran satisfacción al momento de sentir el olor de la persona deseada.

Evidentemente, la excitación aumenta si se relaciona dicha prenda con alguna fantasía sexual, es por eso que en los últimos años y gracias a las plataformas digitales que venden contenido para adultos, esta práctica se ha incrementado, debido a que los compradores esperan estar más cerca de la mujer de sus sueños.

Pero si aún necesitas más información sobre el porqué hay hombres que desean comprar una prenda íntima, es porque de cierta forma se crea una especie de complicidad, la cual tiene que ver directamente con el orgullo de los caballeros, ya que al adquirir las prendas, tienen claro que la mujer la usó únicamente para su disfrute.